Un diente roto puede ser una experiencia angustiante que se puede producir por un accidente, una caída o al morder algo duro. Afortunadamente, existen varias soluciones odontológicas para restaurar tanto la función como la estética de la pieza o piezas dañadas. A continuación, exploramos las opciones más comunes que utilizamos en la clínica eligiendo siempre la más indicada para el caso concreto que nos acontece y guiados bajo la premisa conservadora.
1. Reconstrucción con resina compuesta.
Para pequeñas fracturas o astillas, la reconstrucción con resina compuesta es una opción ideal. Este material, que se adhiere al diente, se moldea y se pule para que coincida con el resto de la dentadura. Es una solución rápida, indolora y estética, que puede durar muchos años con el cuidado adecuado.
2. Carillas dentales
Las carillas son finas láminas de porcelana o resina que se adhieren a la parte frontal del diente. Esta solución es excelente para fracturas más grandes o cuando se busca mejorar la apariencia general de la sonrisa. Las carillas no solo restauran el diente roto, sino que también proporcionan una solución duradera y altamente estética.
3. Coronas dentales
Cuando la fractura es más extensa y afecta la estructura del diente, se puede requerir una corona dental. Las coronas cubren completamente el diente dañado, restaurando su forma, tamaño y función. Están hechas de materiales resistentes como la porcelana o el zirconio, garantizando una solución duradera y estética.
4. Tratamiento de conductos
Si la fractura expone la pulpa del diente, puede ser necesario un tratamiento de conductos antes de restaurar el diente. Este procedimiento elimina la pulpa dañada y sella el conducto radicular, evitando infecciones y preservando la estructura dental. Después, se suele colocar una corona para proteger el diente tratado.
5. Extracción y reemplazo
En casos extremos, cuando el diente está gravemente dañado y no se puede salvar, la extracción puede ser la única opción. Sin embargo, el diente extraído puede ser reemplazado con un implante dental, un puente o una prótesis, asegurando que la función y la estética de la boca no se vean comprometidas.
¿Qué hacer tras romperse un diente?
Es fundamental acudir al dentista lo antes posible. Mientras tanto, enjuaga tu boca con agua tibia, aplica una compresa fría para reducir la hinchazón y, si es necesario, toma un analgésico para el dolor. Si has perdido un fragmento del diente, guárdalo en leche o en solución salina y llévalo contigo al dentista.
En Miravéco, entendemos la importancia de una respuesta rápida y efectiva ante un diente roto. Ofrecemos diversas soluciones personalizadas para cada caso, ayudándote a recuperar tu sonrisa de manera rápida y segura.
