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El alcohol puede promover enfermedades

El consumo de alcohol puede aumentar el riesgo de enfermedades, como las cardiovasculares, al modificar el microbioma de la boca y afectar a todo el organismo. Al acabar con las bacterias útiles y favorecer el crecimiento de bacterias nocivas asociadas a la enfermedad periodontal, beber cantidades excesivas de alcohol puede desequilibrar los microbios asociados al cáncer y las enfermedades crónicas.

Se calcula que las personas que beben y fuman mucho tienen 38 veces más riesgo de desarrollar cáncer oral. Además, el exceso de alcohol, especialmente mezclado con bebidas gaseosas, puede aumentar los niveles de ácido en la boca. Esto puede provocar erosión dental.

Dientes manchados

Beber vino, sangría e incluso cerveza más de una vez a la semana también puede decolorar su sonrisa. Al igual que el té verde o el café, estas bebidas tienen una gran cantidad de agentes colorantes que se alojan en las crestas naturales de tu esmalte, haciendo que se vean amarillos. Aunque el blanqueamiento dental es una gran solución, los resultados son sólo temporales, y se desvanecerán más rápido si bebes con regularidad.
Las bebidas como la Coca cola, que se utilizan a menudo como mezclas, también los manchan. Por muy aburrido que nos parezca, la mejor bebida para nuestros dientes, y para nuestra salud en general, es el agua.

Esmalte desgastado

Son muchas las opciones de bebidas, más allá del agua, que pueden corroer rápidamente tu esmalte, predisponiéndote a caries y enfermedades de las encías. Y es que nuestro esmalte natural, a pesar de ser la sustancia más dura del cuerpo humano, puede disolverse rápidamente cuando se expone a la acidez.

El alcohol y los cítricos son increíblemente ácidos y pueden dañar rápidamente nuestros dientes si los bebemos recurrentemente. Peor aún, si el alcohol que bebemos contiene grandes cantidades de agentes colorantes, pueden introducirse bajo el esmalte debilitado y manchar los dientes más rápidamente. Las bebidas más ácidas son el vino y los cócteles con limón o lima.

Cuidado con las bebidas azucaradas

El consumo de azúcar también puede desempeñar un papel importante en la caries y en la salud bucal en general. Hay bacterias específicas en la boca que se alimentan de azúcar.

Repercusiones en la higiene bucal

El alcohol también puede influir en el cuidado de los dientes. Si eres propenso a beber en exceso, es más probable que te saltes la higiene bucal por la noche. Cada noche que no te cepillas los dientes ni usas hilo dental, las bacterias bucales tienen más tiempo para atacar tus dientes y encías. Y como el alcohol reseca la boca, las bacterias orales proliferan en las noches en las que has bebido. Aumentará el riesgo de sufrir enfermedades de las encías y caries.

Beber con moderación está bien, pero es importante entender cómo la bebida puede afectar a tu salud bucodental en general. Si ha pasado tiempo desde tu última visita al dentista, puede ser una buena idea concertar una cita. Y si quieres despejar alguna duda sobre el tema de las bebidas y cómo afecta a sus dientes., no dudes en consultarle.

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